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El mito del castigo de Danta

Germán Jiménez

Autor

Indígena hombre y mujer uno al frente de otro, en medio de la selva.

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El castigo de Danta forma parte de los mitos sobre los habitantes prehispánicos, de Venezuela. Es un mito piapoco, un pueblo indígena que llegó a estar, parcialmente, en las riberas del Orinoco, así como hacia lo que luego fuese Nueva Granada y actualmente Colombia.

El castigo de Danta

La historia habla de Danta, quien que vivía con su mujer, previo a la existencia de los piapocos. La mujer solía prepararle el casabe a Danta, para que este fuese a buscar alimento, pero este siempre volvía con las manos vacías, hasta que un día el dios de las Dantas lo castigó.

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Un eco aborigen

Este relato anónimo, aunque posiblemente escrito o recopilado luego de la formación de la familia hispana en América, tiene una serie de elementos que nos permite construir el perfil de aquellas tribus. Danta tiene de mujer a su hija que se encarga de prepararle el casabe todos los días. Los piapoco practican la exogamia, y posiblemente los antepasados también lo hacían. Por otro lado, se conoce que las mujeres se dedican a la fabricación del casabe.

La humanización de la danta y el guanaguanare forma parte de los personajes, lo que le da un toque de fábula. Los restos de Guanaguanari fueron colocados en una «canastilla» y estos volaron río abajo. Aquí se suma otro elemento, que es la antropofagia o canibalismo. Danta, escondido, sigue a Guanaguanari, y espera a que este deje los restos vulnerables para comérselos. Aunque esta práctica era conocida en los caribes.

Por último, tenemos el castigo de la mano de una deidad. La mujer, impotente de probar el engaño, se encuentra con el dios de las Dantas. Aquí viene lo exotérico1 —diferente a esotérico— y una característica común en varios pueblos aborígenes, como lo podemos ver en relato de Amalivaca y es el de la presencia de una o más deidades, que vienen para intervenir y castigar. No es una presencia omnipotente, ni omnipresente, pero sí superior. Así es como el Dios, al descubrir lo que está pasando con Danta, decide quitarle los restos del padre de Guanaguanari, y exponerlo ante su mujer.

El engaño de Danta es castigado con la exposición, la verdad siempre sale a la luz, y es el mensaje de este relato, posiblemente para crear conciencia sobre las consecuencias sobre mentir.

Resumen

El castigo de Danta es un relato corto, lejos de ser una obra literaria, recopila parte del pasado aborigen, donde aparecen varias características como:

  • La exogamia, dando a entender la relación del padre con su hija.
  • El uso de nombres que le dan a los animales, como Danta y Guanaguanari.
  • La antropofagia, cuando Danta se come el padre de Guanaguanari.
  • La intervención de una deidad, para castigar un comportamiento que solo un ser superior puede exponer.
  • El engaño y la viveza del hombre, que toma todo para él, dejando a su mujer «flaca y triste».
  • La moraleja implícita de que aquel que actúa de esa forma, será castigado.
Sobre la portada del artículo

La imagen destacada es una interpretación con inteligencia artificia y no pretende apegarse a las características de los piapocos.

  1. Exotérico. Sería lo opuesto a lo esotérico, en este caso, el poder de Dios viene de afuera, y es cuando el hombre, reza, ora, pide o se encuentra con esta presencia, que tiene contacto con su presencia, a diferencia de lo esotérico, donde el poder está adentro, oculto en nosotros. ↩︎

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