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La asesina de la quinta Taumus

Foto de Cibell la asesina de la quinta Taumus

En 1994 un caso generó polémica en las noticias nacionales. Una joven, de familia libanés, asesinó a dos personas para recuperar el dinero de una compra que hizo sin autorización de su padre. La asesina de los Naranjos, es uno de esos casos que, hoy casi olvidados, queremos traer para dar a conocer parte de la realidad de los años 90 en Venezuela.  Origen libanés  En la ciudad de Caracas, el 24 de enero de 1976, una familia drusa da a luz a Cibell Naime Yordi. Para entender un poco el contexto familiar, Cibell nació teniendo ascendencia libanesa y practicante de una religión poco conocida en Venezuela. El drusismo es una religión monoteísta con origen Abrahámico,  el fundador fue el persa Hamza ibn Ali ibn Ahmad.que habita principalmente en Siria, el Líbano, Jordania e Israel. Esta religión no es una rama del Islam, no acepta la poligamia ni el culto fanático a figuras y templos, aunque no es del todo rígida, porque su origen la ha llevado a diluirse en el contexto donde se desenvuelven y puede verse sincretismos con el catolicismo local y con otras religiones. Para ser druso se deber nacer druso, por ello puede que no sea una religión tan grande como otras. Ellos se autonombran como Ahl al-Tawhīd (gente de un solo Dios). Los padres de Cibell fueron la pareja  constituida por Shauki Naime y Salam Yordi de Naime. Cibell, según la tradición Drusa, estaba destinada a contraer matrimonio con un hombre del mismo credo, por lo que sus padres esperaban que culminara sus estudios para llevarla al Líbano a cumplir con la tradición. Los drusos no aceptan la conversión al druso, como se explicó anteriormente, así que solo alguien nacido druso podría ser el elegido, aunque como en todo, el propio tiempo y lugar donde se desarrolla puede generar cambios en las prácticas religiosas. Un anuncio en el diario La joven de ascendencia libanés era conocida por ser inestable emocionalmente. A los 18 años cursaba tercero y cuarto año en parasistema, en el Colegio para adultos Minerva en Prados del Este, cuando ya otros de su edad estaban en la universidad o trabajando. Su padre, posiblemente por su cultura originaria, solía dar fuertes reprimendas lo que hacían de ella temer a la ira de su padre.  A finales del año 1994, durante el mes de noviembre, Cibell leyó un anuncio en el diario donde ofrecían gatos de raza angora en venta. Interesada, llamó para consultar los precios y tomó la decisión de comprar uno. Acordó el encuentro con el vendedor para el martes 6 de diciembre de aquel año, durante la tarde.   Miguel Tauil Musso tenía 28 años, era un abogado dedicado a la cría de animales de raza para su comercialización. Se había asociado con un joven amigo, de nombre Juan Carlos González de 19 años, estudiante de farmacia en la Universidad Santa María. El 6 de diciembre se encontró, en el estacionamiento del Colegio Minerva, con una joven de baja estatura, tez morena y ojos negros. Miguel verificó el nombre de la compradora antes de salir.  Apenas Cibell vio al vendedor con el gato fue hacia él y se presentó. Luego de conocerse le pagó con un cheque de 20.000 bolívares y recibió el gato. Miguel se retiró dejando a la joven con el gato.  ¿Algo falta? El padre de Cibell, Shauki Naime, era un obstetra ordenado y meticuloso. Ese hábito de tener todo en orden lo llevó a notar que faltaba un cheque. Revisó los talonarios y comprobantes confirmando, hasta dar con la ausencia de uno del Banco Unión.  Llamó a una reunión familia e interrogó a todos sus hijos. Todos negaron haberlo tomado, pero por la cara de Cibell, empezó a sospechar de ella.  El miedo en ella la envolvió. Sabía que si era descubierta, su padre podía propinarle un terrible castigo. Al parecer, una vez, solo por engordar la hizo hincarse de rodilla toda una noche.  Llena de terror, decidió llamar a Miguel para pedirle el cheque de vuelta, pero este, que ya lo había cobrado, se negó. Martes 13 «Esa tarde llegué en un taxi a Los Naranjos, me bajé frente a la garita de seguridad donde habían cuatro vigilantes e hice el trayecto a pie hasta la Quinta Taumus» Durante varios días, Cibell llamó a Miguel múltiples veces, primero pidiendo, luego solicitando y por último suplicando. Pero Miguel se negó siempre.  Siete días después de aquella venta, Miguel recibió otra llamada. Era martes 13, cuando una mujer llamada Adriana se comunicó interesada por unas perros salchichas. La compradora propuso que se encontraran a las 14:00 horas en una panadería del centro comercial Plaza Las Américas, en El Cafetal. Sin embargo, Miguel propuso que mejor fueran a su casa en Los Naranjos para que pudiese ver a los perritos, lo cual aceptó.  Lo que Miguel no sabía era que Adriana era realmente Cibell, que luego de la furia de su padre decidió buscar la forma de que este le reembolsara el dinero.  Al encuentro fue con una pistola calibre 7.65 que guardaba su padre, como medio de disuasión, si Miguel se negaba a devolverle el dinero. Tomó un taxi y se fue hasta Los Naranjos, que la dejó en la garita de vigilancia desde donde caminó hasta la quinta Taumus.  Al llegar fue recibida por la madre de Miguel, Mirtelina Musso de Tauil, con café. Como su plan se había afectado por el cambio de ubicación, tuvo que mentirles y decir que una tía era la interesada en los perros y que le esperaba en la garita de vigilancia. Juan y Miguel salieron amablemente con Cibell en una camioneta Toyota Samurai a buscar a la tía. Ella estaba en el asiento posterior, y antes de llegar a la garita le solicitó que le devolviera el dinero. Como Miguel se negó, sacó la pistola para asustarlo, pero al hacerlo se produjo un forcejeo que terminó con un tiro en la cabeza de Miguel.  Bajo el miedo de lo que había